Ayer tuve una despedida más. Otro buen Conejo que voy dejando en el camino.
Anuncios
Ayer tuve una despedida más. Otro buen Conejo que voy dejando en el camino.
Me volvió a pasar. Dos horas en el autobús, parada y con tráfico. Algo que en El Pueblo no sería de extrañar. Un trayecto normal de Santa Fé a Tlalpan. Pero no en La CIudad de la Eterna Llovedera que mide un cuarto de la otra y el transporte público vale como si estuviera pagandome una Hummer.
En fin, pacientemente, asumí el reto de pasar 4 horas de mi vida en un autobús, me preparé con libros, un iPod cargado de podcasts para mejorar mi pronunciación y zapatito bajo. Hecho.
Estaba llegando a las 10pm a casa cuando sentí esa sensación de haber olvidado algo. Y sí. Las llaves! Podría parecer un hecho estúpido pero no cuando estas afuera